Enrique GodoyLIBERTAD DE LA CULPA
Salmos 51:14
Devocional
Octubre 19
Pastor Enrique Godoy
Iglesia Cristiana Remanente
Calle Liverpool 44,
Colonia Juárez Ciudad de Mexico
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Texto Salmo 51: 14 (leer)
David quería enseñar porque estaba seguro del Perdón de Dios, porque estaba seguro que había por todos lados trasgresores que eran terribles y que seguían asesinando a miles. Por eso David clama: “Líbrame de homicidios, o Dios de mi salvación”, (V. 14) En otras palabras David pide que lo libere de la culpabilidad de ese derramamiento de sangre que cometió al haber mandado asesinar a Urías con la espada de los hijos de Ammon.
Esa es una carga difícil de llevar; porque aunque Dios le ha perdonado, parece estar ahí en la conciencia de David que no puede quitarse tan fácilmente, no en un sentido de culpabilidad, sino de tristeza por haber privado la vida de inocentes, ¿se pueden imaginar?.
Las consecuencias fueron muchas por lo que hizo. Y uno de tantos, Dios, por medio de Natán, haría morir el niño que Betsabé había dado a luz. “…el hijo que te ha nacido ciertamente morirá” (V.14b). ¡Terrible ¿no?. No obstante lo más difícil de llevar a cuestas, es lo que Natán la había dicho anteriormente en el V. 10, y que sin duda quedó marcado para siempre. “Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la espada, por cuanto menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías heteo para que fuese tu mujer”
Noten que cuando Dios perdona nuestros pecados, nuestras trasgresiones, nuestras maldades, desgraciadamente y en algunos casos, no en todos, las consecuencias son muchas, y en este caso, se queda para siempre. Y lo más probable es que por eso David esté clamando “Líbrame de homicidios, o Dios de mi salvación”. La Casa de David estuvo cubierta de violencia siempre. Chequen ustedes…
1. La Muerte violenta de Amon. (2 Samuel. 13: 28, 29)
2. La Muerte de Absalón. (2 Samuel. 18: 14, 15)
3. La Muerte de Adonías. (1 Reyes. 2: 24, 25)
Así sucede con muchos, caen en pecados gravísimos; luego, los llegan a reconocer, se arrepienten y son perdonados; pero desgraciadamente las consecuencias son muchas como en el caso de David. A veces es por un largo tiempo, o tal vez años. como en el caso de una deuda, que tiene que pagarse. Un hijo fuera del matrimonio. Dios perdona, pero la responsabilidad de ver por ese hijo, es por mucho tiempo. El Señor perdona esos pecados del pasado, pero las huellas quedan grabadas, y hay que enfrentarlas con valentía, humildad, y responsabilidad.
Y ahora al volver a nuestro texto, vemos lo que pasa cuando Dios le quita esa culpabilidad, esa carga a David, noten ustedes lo que dice: “Cantará mi lengua tu justicia”. ¿Qué significa esto?; la fidelidad de Dios a su promesa de perdonar al pecador arrepentido, Dios ha de proveer alabanza por la Gracia del perdón; pero ha de proveer en ese canto la Justicia de Dios.
¿Se dan cuenta de cómo debe ser la Alabanza de nuestros labios por haber sido rescatados del pecado? En los cantos deben manifestarse la Justicia de Dios. Por eso es que David como buen pastor y buen músico desde su juventud; quiere cantar su canto de Justicia. En otras palabras toda alabanza salida de nuestros labios deben dar a conocer La Salvación de Dios, la Justicia de Dios imputada a Cristo por nuestros pecados.
Esto, no es sólo es un deleite, sino un deber. Las alabanzas que solo satisfacen el oído, no expresan nada, en cambio las alabanzas que expresan la Gracia y el Perdón, debemos sentirnos insuficientes para entonarlas, por eso concluye esta parte en el….Salmo 51: 15 (leer)
Que Dios te Bendiga
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