Iglesia Cristiana Remanente

Devocional: HIJOS EJEMPLARES Parte 2 – Efesios 6:2-3

Devocional: Mayo 1

HIJOS EJEMPLARES Parte 2
Efesios 6:2-3
Devocional Mayo 1
Pastor Enrique Godoy
Iglesia Cristiana Remanente
Calle Liverpool 44, Colonia Juárez Ciudad de Mexico
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¿Qué tal, hermanos? ¿Cómo están?
¡Buenos días! Bueno, estamos aquí queriendo edificarnos un poquito con estos devocionales. Y miren, hoy, primero de mayo, vamos a ver Hijos ejemplares, parte dos, y nos vamos a basar, por supuesto, en Efesios 6:2-3.

Dice la Palabra de Dios:
“Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa: para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra.”

Ustedes recuerdan que el día de ayer comenzamos a hablar del papel de los hijos, y leíamos todo lo referente a la obediencia, ¿se acuerdan? A la obediencia al Señor, y por supuesto, lo que es también justo delante de sus ojos. Pero hoy, para no dejar al aire todo el pasaje de Efesios, me permito tomarlo nuevamente y ver todo lo relacionado con los hijos, para no dejar cabos sueltos. Veremos esta segunda parte para completar así el pensamiento de todo lo que Pablo nos quiere decir ahí, lo que nos quiere enseñar, ¿no es cierto?

Bueno, mira, este es el punto número dos: “Honra a tus padres.”
Es el versículo que dice: “Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa: para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra.” ¿Quién no quiere que le vaya bien? ¡Claro que sí!

Pero mira, nota: el primer mandamiento o el primer mandato es el mandato de honrar a tus padres. Vamos a ponerle como inciso A: “El mandato de honrar a tus padres.” Ahí está: “Honra a tu padre y a tu madre.”

Pablo aquí está diciendo prácticamente lo que dice Éxodo 20:12. Honra es una palabra que se refiere a estimar, a respetar y, por supuesto, también incluye el concepto de apoyo financiero (por si no lo sabías). Honrar a nuestros padres quiere decir tratarlos con respeto, amor, reverencia, dignidad, y también asistirlos financieramente.

Según el pastor Ur, en su Biblia de notas, en la página 1474 puedes verlo. El contexto está claramente hablando de honrar a nuestros padres, pero está más claramente enfocado en cuanto al apoyo financiero. Es como lo que dice en 1 Timoteo 5:3:

“Honra a las viudas que en verdad lo son. Pero si alguna viuda tiene hijos o nietos, aprendan estos primero a ser piadosos para con su propia familia y a recompensar a sus padres, porque esto es bueno y agradable delante de Dios.”

¡Wow! Entonces, verdaderamente es una gran responsabilidad. Antes de que la iglesia asuma la responsabilidad de proveer a las viudas (que por supuesto es un deber de la iglesia, pero sólo cuando verdaderamente lo sean), sus hijos y nietos, según este pasaje, tienen la responsabilidad de proveer para sus necesidades económicas.

Un hijo o nieto obediente, piadoso, muestra su piedad de esa manera: su obediencia al proveer para las necesidades de su madre o abuela que esté pasando por necesidad. Imagínate, ¿cuántas no tienen necesidades? Por supuesto, hay que recompensar a sus padres.

Se puede decir que los hijos apoyan económicamente con una pequeña porción, comparado con lo que sus padres les dieron amorosamente a través de sus vidas: aquellos que los trajeron al mundo, que les proveyeron un techo, los vistieron, los criaron, los cuidaron, estuvieron al pendiente de su salud… ¿Es mucho pedirle a un hijo o nieto que apoye económicamente a sus padres o abuelos en necesidad, después de todo lo que han dado a lo largo de su vida? No, no es mucho. En absoluto. De hecho, en ese sentido, está endeudado con sus padres o abuelos. Esa es la verdad.

Ahora, ¿cuál es la razón de todo esto?
Porque esto es bueno, dice nuestro versículo, y agradable delante de Dios. Esto es bueno. En otras palabras, un hijo o un nieto tiene la responsabilidad de obedecer mientras esté bajo el techo de sus padres, pero tiene también la responsabilidad —escucha esto— de honrarlos toda la vida, siempre y cuando haya necesidad de parte de los padres.

Aun cuando dejes el techo de tus padres, aun cuando te cases, para tu conocimiento, aun cuando ya vivas en otro hogar, en otra casa, tienes el deber de honrarlos de esa manera.

Y podemos ver esto también en Éxodo.
A ver si alcanzo… aquí está: Éxodo capítulo 20, versículo 12, dice:

“Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.”

¿Ves? Por quedar dentro de esta lista, este mandamiento es clasificado como uno de los mandamientos con promesa. Tiene promesa. Lo que leemos en Efesios acerca de la promesa se aclara: “Tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.”

Ahora, no lo vamos a hacer por ese interés. No porque el día que el Señor te llame a su presencia vaya a depender de si obedeces o no. Pero no lo vamos a hacer por eso.

En segundo lugar, si quieres, pasa otra vez a Efesios capítulo 6, versículo 3:
“Para que te vaya bien y seas de larga vida sobre la tierra.”

Esta promesa también se refiere a la calidad y cantidad de vida, como señala un autor: calidad, “para que te vaya bien,” y cantidad, “y seas de larga vida.” Un hijo obediente no solo vivirá plenamente satisfecho —escucha esto—, sino que vivirá la cantidad de tiempo que Dios ha establecido, en lugar de morir antes de tiempo por desobediencia.

Ahí está. Por algún tipo de disciplina, por ejemplo, por exponerse a situaciones peligrosas por su insubordinación.

Ahora, otro propósito:
“Y seas de larga vida sobre la tierra.”
No solamente te va a ir bien, sino que será de larga vida. El creyente es guardado de la disciplina del Señor en muchos casos, incluso extremos: ser disciplinado fuera de la iglesia, ser expulsado de la escuela, ser despedido del trabajo… te arriesgas a eso. O terminar en la cárcel.

Obviamente no deseamos nada de esto para ninguno de ustedes, no, nadie. Pero estas son las consecuencias de ser irresponsable con lo que estamos viendo: hasta un divorcio, o incluso la muerte.

Todo eso puede ocurrir porque Dios tiene el derecho de disciplinar.
Y realmente todo esto es por no obedecer lo que dice el Señor, por no someterte a su mandato, por no honrar a tus padres y no honrar a Dios en Su autoridad.

Entonces, el diseño de Dios para los hijos es que obedezcan y honren a sus padres.
Si tú aún vives bajo el techo de tus padres, tienes la responsabilidad de obedecerlos en todo, excepto si es pecado. Ya lo sabes, porque así es como Dios lo ha establecido. Es lo correcto, es lo justo, es lo que Dios ordena. Y punto.

Nos callamos la boca, no decimos nada, no replegamos, no cuestionamos a nuestros padres cuando nos mandan hacer algo, aunque sea fastidioso.
¿Sí, a veces es fastidioso? Pues sí. Pero Dios te manda hacerlo.

Y el resto de ustedes, que ya no viven bajo el techo de sus padres,
Aun cuando tengan 60 años de edad, estén casados, tengan hijos grandes, y quizá nietos, tienen aún la responsabilidad de respetar y ayudar económicamente a sus padres.

Así que ya lo sabes, hermano, hermana: no importa que estés fuera de tu casa. Si tus padres tienen una necesidad, tienes que ayudarlos. Eso es lo que manda el Señor.

Así que no, no, no: esto no es solo para niños, este pasaje que acabamos de ver. Porque, ¿de dónde van a sacar los niños para ayudarle a sus padres? No, esto es para jóvenes grandes, adultos, incluso de veras viejos, que estén fuera del hogar y aún viva su madre o su padre por ahí. Tienes el deber de ayudarlos.

Bueno, que Dios te bendiga.
Nos vemos mañana, primeramente Dios.

Enrique Godoy

Me convertí en 1982. Casi inmediatamente me dedique a Tocar y cantar para el Señor. Ministramos en la música por varios años. Estuve siendo discipulado por 8 años. El Señor me llamó al Pastorado en 1990. Estudié en el "Seminario de Puebla" donde hice una Licenciatura en preparación de Líderes. Seguimos ministrando con la Alabanza junto con mi esposa Lucy. Luego en 1991 me invitaron a "Grace Community Church" para hacer conciertos en la Iglesia Hispana. Y ahí conocimos a varios Respetables Pastores, entre ellos a John MacArthur, Henry Tolopilo, etc.

Seguí pastoreando la Iglesia Cristiana Remanente por varios años hasta que recibimos la bendición de tener Nuestro Propio Local y de Estudiar en el "Seminario Bíblico Palabra de Gracia" siendo la Primer Generación de Graduados. Luego fui parte de la Facultad y sigo enseñando Teología III y IV y Ministerio Pastoral I y II. Tenemos Tres Hijos cristianos por la gracia de Dios. Jonathan Godoy (graduado del Seminario), Tanya Godoy (Casado con un Pastor) y Isaías Godoy (Graduado en Master´s Seminary en Maestría en Divinidades y Maestría en Teología y estudiando el Doctorado) Mi esposa Lucía ha sido mi ayuda idónea por 48 años, y entre pruebas y luchas nuestra vida es para darle la Gloria y Honra a Nuestro Gran Dios y Salvador Jesucristo. Y nuestro principal propósito es que esta Iglesia sea UNA IGLESIA EJEMPLAR.

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